domingo, 24 de noviembre de 2013

ARTURO Y CLEMENTINA


La primera edición de "Arturo y Clementina" vio la luz, de la mano de Editorial Lumen, en 1976.
De la mítica colección "A favor de las niñas", se trata de una historia fabulada que reivindica el rol femenino en la sociedad, combate los estereotipos sexistas y denuncia la discriminación.


Su tema es la libertad perdida, por una tortuga hembra, en la relación de pareja, en la que la tortuga macho le da todas las cosas que ella quiere hacer por sí misma, para que no las pueda hacer y se cargue y cargue de rémoras en su camino a la libertad.
Este cuento infantil, de Adela Turín , con ilustraciones de Nella Bosnia, nos narra como, al casarse, Clementina soñaba con una vida llena de aventuras y descubrimientos.
Arturo le proporcionó una vida tranquila y sin sorpresas 
¿Quería aprender a tocar la flauta? Arturo le ofrecía amablemente un disco.

¿Quería pintar? Le regalaba un bonito cuadro.
¿Quería ir con él a Venecia? Le compraba un precioso jarrón de Murano.
Clementina carga con los regalos, agota sus posibilidades y se aburre a morir. Hasta el día en que decide vivir a su gusto, elegir por sí misma lo que le conviene.
Arturo, cuando encuentra la casa vacía, no entiende nada.

Os recomiendo su lectura, o la relectura en su caso, porque aún se necesitan obras sobre coeducación e igualdad, como ésta.

 Podéis leerlo entero en:

http://www.ceibal.edu.uy/UserFiles/P0001/File/arturo_clementinaI.pdf

viernes, 25 de octubre de 2013

LAS PENSIONES SON VIABLES


Artículo del economista Vicenç Navarro sobre las pensiones, aparecido en la revista digital "La Republicana" de este mes de octubre:

LAS PENSIONES SON VIABLES
VICENÇ NAVARRO

Graves errores metodológicos hechos por los economistas (y los medios de información y persuasión) liberales en sus diagnósticos del colapso de las pensiones.
Recientemente hemos visto una avalancha liberal que tiene como objetivo alarmar a la población haciéndole creer que las pensiones no son viables. La Comisión Europea, el Banco de España, el BBVA y el Partido Popular Europeo (del cual el PP español forma parte) han publicado informes y documentos que alertan a la población española de que hay que reducir las pensiones porque el sistema de Seguridad Social que las financia no es sostenible. En defensa de sus posturas presentan datos e información empírica que asumen que apoyan sus alarmas sobre las cuales basan sus recomendaciones. Todos estos documentos tienen errores graves que invalidan sus conclusiones, transformando tales documentos en manifiestos políticos en lugar de informes científicos. Veamos tales errores.

1. Asumir que la esperanza de vida mide los años que una persona vive
Tales documentos asumen erróneamente que el hecho de que la esperanza de vida promedio de España haya pasado de ser 76 años a 80 años en veinticinco años (1980-2005) quiere decir que el promedio español vive ahora cuatro años más.
Ello no es cierto. Hay que saber qué quiere decir esperanza de vida y cómo se calcula. Supongamos que España tuviera sólo dos habitantes. Uno, Pepito, que muere al día siguiente de nacer, y el otro, la Sra. María que tiene 80 años. La esperanza de vida promedio de España sería 0 años más 80 años, dividido entre dos, es decir, cuarenta años. Pero supongamos que en un país imaginario vecino, hay también dos ciudadanos, uno, Juan, que en lugar de morir al día siguiente de nacer, como Pepito en España, vive veinte años, y la otra persona es la Sra. Victoria que tiene también 80 años como la Sra. María. En este país imaginario, la esperanza promedio de vida es de 20 más 80, dividido entre dos, es decir 50 años, diez años más que en España. Ello no quiere decir (como constantemente se malinterpreta este dato) que el ciudadano promedio de aquel país viva diez años más que en España: lo que el dato dice es que hay diez años de vida más en el promedio de aquel colectivo de dos personas sin clarificar que ello se deba a que la Sra. Victoria viva diez años más que la Sra. María (lo cual no es cierto), o que sea Juan el que vive veinte años más que Pepito. Todos los documentos que favorecen la reducción de las pensiones concluyen que la Sra. María vive diez años más, lo cual, repito, no es así.
Lo que ha estado ocurriendo en España (y en Europa) es que la mortalidad infantil ha ido disminuyendo de una manera muy marcada, con lo cual la esperanza de vida ha ido aumentando, pasando de 76 años a 80 años. Ello no quiere decir, como habitualmente se asume, que el ciudadano español medio viva cuatro años más ahora que hace veinticinco años. La mortalidad por cada grupo etario ha ido descendiendo (incluyendo entre los ancianos), pero los años de vida que el ciudadano medio vive ahora no es de cuatro años más que en 1980. Calcular las pensiones en base a esta lectura  errónea de los datos penaliza a la población pues asume que la gente vive más años de lo que en realidad vive. 

2. Los promedios no son sensibles a las diferencias por clases sociales
Otro gran error es malinterpretar el significado de promedio Una persona se puede ahogar en un río que tiene como promedio sólo diez centímetros de profundidad. Tal río puede ir seco a lo largo de muchos kilómetros pero en algunas zonas éste puede tener tres metros de profundidad, y es ahí donde el lector se puede ahogar. Un promedio en sí no nos dice mucho si no sabemos también las variaciones del promedio.
Lo dicho tiene especial importancia en el cálculo de la esperanza de vida y en la estimación de la longevidad (los años que una persona vive). Las diferencias en longevidad por clase social son enormes. Así, la diferencia en los años de vida existente entre una persona perteneciente a la decila de renta más baja del país (los más pobres) y la decila superior (los más ricos) en España es nada menos que de diez años (ha leído bien, diez años). En EE.UU. son quince y en el promedio de los países de la UE-15 son siete. Estas diferencias en longevidad se deben a que el nivel de salud de la población depende, sobre todo, de la clase social a la cual se pertenece.

Un trabajador no cualificado (en paro frecuente durante más de cinco años) tiene, a los sesenta años, el nivel de salud que un banquero tiene a los setenta años. Este último sobrevivirá al primero diez años. Es profundamente injusto pedirle al primero que continúe trabajando dos (y algunos piden cinco) años más para pagar las pensiones del segundo que le sobrevivirá diez años. La insensibilidad hacia esta realidad mostrada por estos informes es abrumadora. Retrasar la edad de jubilación a toda la población trabajadora sin más, es una medida que perjudica a las clases populares para beneficiar a las clases de mayores rentas que viven más años. 

3. El error del argumento alarmista: el crecimiento del porcentaje del PIB gastado en pensiones es excesivo 
Este es uno de los errores metodológicos más importantes y frecuentes que aparece en el informe de la Comisión Europea, y que ha sido reproducido en gran número de artículos y editoriales. Tal argumento indica que el porcentaje del PIB en pensiones subirá de un 8,4% en el año 2007 a un 15,1% del PIB en el año 2060, un porcentaje que estos informes señalan como excesivo, pues la sociedad en el año 2060 no podrá absorber tales gastos pues restarán recursos necesarios para otras actividades, programas o servicios a la población no pensionista. El hecho de que el porcentaje de gasto en pensiones públicas alcanzará el 15,1% en el 2060 se considera una noticia alarmante que requiere una intervención ya ahora, disminuyendo los beneficios de los pensionistas.
En este argumento se ignora el impacto del crecimiento de la productividad sobre el PIB del año 2060. Supongamos que el crecimiento anual de la productividad es un 1,5%, un crecimiento que incluso el Banco de España admite como razonable. En este caso, el valor del PIB español será 2,23 veces mayor que el PIB del año 2007. Ello quiere decir que si consideramos el valor del PIB del año 2007 como 100, el del año 2060 será de 223. Pues bien, el número de recursos para los no pensionistas en el año 2007 fue de 100 menos 8,4 (8,4 es la cantidad que nos gastamos aquel año en pensionistas), es decir, 91,6. En el año 2060 los recursos a los pensionistas serán el 15,1% de 223, es decir 33, y para los no pensionistas será 223 menos 33, es decir, 192, una cantidad que es más del doble de la existente en el año 2007, 91,6. Debido al crecimiento de la productividad, en el año 2060 habrá más recursos para los no pensionistas que hoy, y ello a pesar de que el porcentaje del PIB dedicado a pensiones es superior en el año 2060 que en el 2007. Los que alarman innecesariamente a la población olvidan un hecho muy elemental.
Hace cincuenta años, España dedicaba a las pensiones sólo un 3% del PIB. Hoy es un 8%, más del doble que cincuenta años atrás. Y la sociedad tiene muchos más fondos para los no pensionistas de los que había entonces, aún cuando el porcentaje del PIB en pensiones sea mucho mayor ahora que entonces. Por cierto, ya hace cincuenta años, cuando España se gastaba un 3% del PIB en  pensiones, había voces liberales que decían que en cincuenta años se doblaría o triplicaría tal porcentaje, arruinando el país. Pues bien, estamos cincuenta años más tarde, y el país tiene más recursos para los no pensionistas que existían entonces, aún cuando el porcentaje del PIB dedicado a pensiones se ha doblado.

4. Se equivocan constantemente en sus proyecciones demográficas
Cualquier demógrafo que tenga un mínimo de rigor sabe las enormes dificultades en calcular cambios demográficos por periodos tan largos como cincuenta años. Y un buen ejemplo de ello es que los bancos y
las cajas publican cada diez años informes anunciando el colapso de las pensiones en diez años. La Caixa (en 1998), el BBVA (en 2005 y en 2007), el Banco Santander (en 1992 y en 1999), el Banco de España (en 1995, en 1999, en 2002 y en 2009) y una larga lista, han predicho el colapso (utilizando un término menos contundente) de las pensiones para diez o al máximo veinte años más tarde.

En defensa de sus proyecciones utilizan los mismos argumentos y los mismos datos (la Comisión Europea
utiliza prácticamente los mismos datos que publicó el informe de la Fundación de las Cajas en 2007). Y una
de las proyecciones más utilizadas es la de la evolución de la pirámide demográfica, indicando que el porcentaje de ancianos está creciendo muy rápidamente, y el de los jóvenes está bajando muy sustancialmente, ignorando que, en aquellos países que financian las pensiones a base de cotizaciones sociales como es el caso español, el punto clave no es el número de jóvenes y adultos por anciano, sino el número de cotizantes y la cantidad de cada cotización por beneficiario. Y tanto el uno como el otro están subiendo, el primero como consecuencia de la integración de la mujer al mercado de trabajo (si España
tuviera la tasa de participación de la mujer en el mercado de trabajo que tiene Suecia, habría tres millones
más de cotizantes a la seguridad social), y el segundo como consecuencia del aumento de la productividad
y de los salarios. Es más, toda la evidencia muestra que las familias españolas desearían tener más hijos
(dos por familia) que los que tienen ahora. El desarrollo de la sociedad y de los servicios de ayuda a las familias, como escuelas de infancia y servicios domiciliarios, permitiríael incremento de la fecundidad, una
de las más bajas del mundo. Hoy en Europa, los países nórdicos, con un amplio desarrollo del estado del
bienestar, tienen una fecundidad mucho mayor que en el Sur de Europa.

Dos últimas observaciones.  El hecho de que el rigor y credibilidad de tales documentos liberales
sea muy escaso no quiere decir que no tuviera que haber cambios en las pensiones, cambios distintos al retraso de la jubilación o disminución de sus beneficios que proponen los liberales. Contrariamente a lo que se dice constantemente, las pensiones, incluyendo las contributivas, son demasiado bajas, y ello como consecuencia de que los salarios son demasiado bajos (ver el excelente capítulo sobre las pensiones escrito por la profesora Camila Arza en el libro La Situación Social en España. Vol. III. Biblioteca Nueva. 2009).
Otro cambio que debiera ocurrir es la flexibilización de la edad de jubilación permitiendo que aquellas
personas (la mayoría profesionales) que desearan jubilarse más tarde pudieran hacerlo. La jubilación debiera
ser un derecho, no una obligación.
Debiera también prohibirse, como se ha hecho en varios países, la prejubilación utilizada por el mundo
empresarial para realizar cambios en sus plantillas, penalizando el sistema de seguridad social y al prejubilado, pues éste recibe una pensión menor. Tal prejubilación le supone a España un recorte de ingresos equivalente a un 6% del PIB
Una última observación es que el Estado debiera aumentar su aportación a las pensiones tal como lo hacen
otros países (como Dinamarca), en que las aportaciones procedentes de los impuestos generales son mucho
más intensas que en España. No hay nada sagrado en la Biblia económica que diga que las pensiones
tienen que pagarse a base de cotizaciones sociales. La popularidad de las pensiones (entre todos los grupos
etarios) es tal que puede justificarse tal medida que contaría con gran apoyo popular. España ya lo hizo con
la sanidad (que estuvo financiada por la Seguridad Social) y puede expandirlo a otras áreas.

martes, 18 de junio de 2013

LA VOZ DE ALFONSINA RESISTE EL PASO DEL TIEMPO


Tal Lao fue el pseudónimo con que Alfonsina Storni hizo sus primeros pinos como poetisa.
Argentina de adopción, pues nacida en Suiza (1892), llegó con cuatro años a la tierra de promisión, llevada  por sus padres, que huían de las estrecheces económicas a que se vieron reducidos tras un período de bonanza en su tierra natal.

"A los doce años escribo mi primer verso. Es de noche; mis familiares ausentes. Hablo en él de cementerios, de mi muerte. Lo doblo cuidadosamente y lo dejo debajo del velador, para que mi madre lo lea antes de acostarse. El resultado es esencialmente doloroso; a la mañana siguiente, tras una contestación mía levantisca, unos coscorrones frenéticos pretenden enseñarme que la vida es dulce. Desde entonces, los bolsillos de mis delantales, los corpiños de mis enaguas, están llenos de papeluchos borroneados que se me van muriendo como migas de pan"

La neurastenia y el alcoholismo de su padre, Alfonso Storni, la acompañó durante sus primeros años, y a la muerte de su progenitor "perdido en sus vapores" comenzó su duro trabajo.

Alfonsina Storni en su juventud

La madre,Paulina, abrió una escuela domiciliaria y después abrió el "Café Suizo" donde Alfonsina atendía las mesas y lavaba platos con sólo 10 años, pero el proyecto fracasó, y las mujeres hubieron de trabajar como costureras a domicilio, para, después, emplearse Alfonsina en una fábrica de gorras.
Pero la futura poetisa ("Me llamaron Alfonsina, que quiere decir dispuesta a todo"quiso salir de ese ambiente, llevando a la realidad su sueño de ser actriz, y con sólo 15 años realizó una gira de un año en la compañía de José Tallavi.

Esta experiencia le puso en contacto con los dramaturgos clásicos y, a su regreso, escribió su primera obra de teatro.
Para entonces, su madre se había vuelto a casar, y Alfonsina decidió estudiar la carrera de maestra rural.
No quedaron en sus textos demasiadas huellas de esta experiencia, pero sobreabundan los elementos que permiten reconocer en ellas la sensibilidad de las maestras de su época; y éste es uno de los rasgos más delicados de su obra.

Inicia sus carrera docente al tiempo que publica sus primeros poemas, y a los veinte años, próxima a ser madre, llega a Buenos Aires, donde deambula en busca de trabajo en diversas oficinas, trabaja como cajera en una tienda, y consigue una cierta estabilidad con su trabajo como "corresponsal psicológica" en la Casa Freixas Hnos.

"Estoy encerrada en una oficina; me acuna una canción de teclas; las mamparas de madera se levantan como diques más allá de mi cabeza; barras de hielo refrigeran el aire a mis espaldas; el sol pasa por el techo pero no puedo verlo; bocanadas de asfalto caliente entran por los vanos y la campanilla del tranvía llama distante. Clavada en mi sillón, al lado de un horrible aparato para imprimir discos, dictando órdenes y correspondencia a la mecanógrafa, escribo mi primer libro de versos. Un pésimo libro de versos. ¡Dios te libre, amigo, de "La inquietud del rosal"! pero lo escribí para no morir".

Inicia en "La inquietud del rosal" una poesía en que expresa sus deseos como mujer y describe su condición de madre soltera sin ningún complejo.
Este libro no tuvo muy buena acogida, pero vino después una serie de obras, en prosa y en verso en que va mostrando su madurez literaria.

Dejó su trabajo a raíz de algunas críticas de sus jefes, que no veían bien que trabajase allí la escritora de un libro que rozaba los límites de la inmoralidad. 

Su prosa es feminista, ya que busca en ella la igualdad entre el hombre y la mujer, y además, posee una originalidad que cambió el sentido de las letras de Latinoamérica.

La poesía no daba para vivir, y hubo de buscar nuevo trabajo.



Cuando en 1917 es nombrada maestra directora del internado Marcos Paz, ya tiene numerosos amigos en el mundillo literario porteño. En la medida en que fue evolucionando, creciendo literariamente, también lo hizo la estimación intelectual que los integrantes de los diferentes círculos literarios sentían hacia ella, hasta descubrir un día que se hallaban ante una auténtica poeta.
En marzo de 1918, los nervios la obligaron a dejar su puesto de directora y volvió a entrar en los círculos literarios.

A lo largo de "El dulce daño" circula la historia espiritual femenina que parte de la comunión y frescura de la esperanza para concluir en el reclamo de la perdida pureza ("Que mis manos se vean bellamente cubiertas/por capullos de rosas y por rosas abiertas"); las metáforas insisten una y otra vez; sorprende la afirmación de lo corporal en todo el libro: tocar, beber, sentir... Las palabras se corporizan impetuosamente. El afán de sinceridad es perceptible: ("Hice el libro así: gimiendo, llorando, soñando, ay de mi").

Por entonces, Alfonsina trabaja en la escuela de niños débiles mentales del Parque Chacabuco como celadora, da clases de declamación y recitales en entidades populares y en las bibliotecas del Partido Socialista, colabora en diferentes revistas con poemas y artículos literarios e impartió conferencias en Buenos Aires y Montevideo.

Colaboradora de revistas como "Caras y caretas", "Nosotros", "Atlántida" o "La nota" y de periódicos como "La Nación", compartió la vida artística y cultural del grupo "Anaconda" (con Horacio Quiroga y Enrique Amorín), y obtuvo varios premios literarios.
Fue durante la década de 1930 cuando viajó a Europa y tomó contacto con Federico García Lorca y Ramón Gómez de la Serna, participando en el grupo "Signos" y en 1938 participó en el homenaje que la universidad de Montevideo rindió a a las tres grandes poetas americanas: Juana de Ibarbourou y Gabriela Mistral, junto con la propia Alfonsina.

Tres mujeres que pagaron, con la vida o la felicidad, su entrega a la poesía
Su condición de madre soltera no era aceptada por la sociedad de su época, pero ello no impidió el reconocimiento por sus valores literarios, siendo considerada como una de las mayores entre las escritoras y escritores de su tiempo, tras una trayectoria literaria que, desde el romanticismo, fue evolucionando hacia la vanguardia y el intimismo propio del Modernismo, siendo su rasgo más característico su feminismo combativo.


Entre sus obras más importantes podemos destacar:

  1. Dos farsas pirotécnicasBuenos AiresCabautTeatro.
  2. La inquietud del rosalBuenos AiresLibrería de La Facultad1916Poesía.
  3. El dulce dañoBuenos AiresSociedad Cooperativa Editorial Limitada1918Poesía.
  4. IrremediablementeBuenos AiresSociedad Cooperativa Editorial Limitada1919Poesía.
  5. LanguidezBuenos AiresSociedad Cooperativa Editorial Limitada1920Poesía.
  6. OcreBuenos AiresBabel1925Poesía.
  7. Poemas de amorBuenos AiresPorter1926Poesía.
  8. Mundo de siete pozosBuenos AiresTor1934Poesía.
  9. Mascarilla y trébolBuenos AiresMercatali, Impr.1938Poesía.
  10. Entre un par de maletas a medio abrir y Las maneciBuenos AiresEdiciones Católicas Argentinas, Tall. Graf. De1939Discurso/Conferencia.
  11. Teatro infantilBuenos AiresR.J. Roggero1950Teatro.
  12. Cinco cartas y una golondrinaBuenos AiresInst. Amigos del Libro Argentino1959Miscelánea.
  13. Obra poética completa. Poesías completasBuenos AiresSela1968Poesía.

En 1935 se le descubre un tumor en el pecho izquierdo, es operada, y su estado de ánimo la lleva a eludir a los viejos amigos.
Alfonsina se retrae y apenas sale a la calle. vive sus últimos años atemorizada por la muerte.
El suicidio de Horacio Quiroga, en 1937, la impresiona vivamente y, a la vez, funciona como una anticipación.

Publica sus últimos poemas en "La Nación". Tres días antes de su muerte, acosada por el dolor, envía, desde una pensión solitaria de Mar del Plata, su soneto "Voy a dormir". Luego, una noche, se interna en el mar. Su cuerpo es rescatado a la mañana siguiente, la misma en que su último poema sale publicado.
Fue el martes, 25 de octubre de 1938.

En su memoria, Ariel Ramírez y Félix Luna compusieron esta canción, que tantas veces habremos oído de labios de Mercedes Sosa:

Por la blanda arena
Que lame el mar
Su pequeña huella
No vuelve más
Un sendero solo
De pena y silencio llegó
Hasta el agua profunda
Un sendero solo
De penas mudas llegó
Hasta la espuma.
Sabe Dios qué angustia
Te acompañó
Qué dolores viejos
Calló tu voz
Para recostarte
Arrullada en el canto
De las caracolas marinas
La canción que canta
En el fondo oscuro del mar


La caracola.
Te vas Alfonsina
Con tu soledad
¿Qué poemas nuevos
Fuiste a buscar?
Una voz antigua
De viento y de sal
Te requiebra el alma
Y la está llevando
Y te vas hacia allá


Como en sueños
Dormida, Alfonsina
Vestida de mar.
Cinco sirenitas
Te llevarán
Por caminos de algas
Y de coral
Y fosforescentes
Caballos marinos harán


Una ronda a tu lado
Y los habitantes
Del agua van a jugar
Pronto a tu lado.
Bájame la lámpara
Un poco más
Déjame que duerma
Nodriza, en paz
Y si llama él
No le digas que estoy
Dile que Alfonsina no vuelve
Y si llama él
No le digas nunca que estoy
Di que me he ido.
Te vas Alfonsina
Con tu soledad
¿Qué poemas nuevos
Fuiste a buscar?
Una voz antigua
De viento y de sal
Te requiebra el alma
Y la está llevando
Y te vas hacia allá
Como en sueños
Dormida, Alfonsina
Vestida de mar.


Monumento a Alfonsina Storni



martes, 14 de mayo de 2013

SI NO TIENEN PAN, QUE COMAN BICHOS


Pocas horas después de oír la última propuesta de la FAO para acabar con el hambre en el mundo (que nos dediquemos a comer insectos) me entero de lo acaecido en el Colegio Público Isla de Tabarca, situado en una de las zonas más económicamente deprimidas de Alicante. La empresa de Catering correspondiente al comedor escolar de ese centro, tras cumplido un año sin que el gobierno valenciano le pague la deuda, ha decidido suspender el servicio. El ayuntamiento de la ciudad, como medida provisional, se ha prestado a suministrar bocadillos al alumnado durante los dos primeros días, pero después de ellos, más de 260 escolares, la mayoría de ellos en tal situación de precariedad que no hacen más comida al día que la consumida en el comedor escolar.


Ante la repercusión de la noticia, el Consell ha notificado que pagará 12.000 de los 180.000 euros que debe a la empresa.


No es mi crítica para esta pequeña empresa que se ha visto obligada a reducir a 17 trabajadores el total de su plantilla, cuando inicialmente tenía un total de 25, sino para la falta de previsión  de las autoridades educativas que han esperado hasta la trascendencia pública de la situación para enmendar en una mínima parte su desidia. Unas autoridades incapaces de establecer un adecuado sistema de prioridades que prevenga situaciones de este tipo.

En medio de este caos que supone la decidida apuesta de las administraciones por la progresiva eliminación del carácter público del sistema educativo, se eleva el lamento de la clase más perjudicada: la más deprimida, como siempre, pues en la marcada polarización de los gobiernos central y autonómicos hacia una creciente  postura de favor a la enseñanza privada y concertada se vislumbra con, cada vez más impotencia por parte de quienes defendemos el sistema público, que los centros de enseñanza públicos van circunscribiendo su alumnado, casi exclusivamente, al procedente de las familias más humildes, más marginadas...


Un pueblo sin educación es un pueblo sin futuro. Y un pueblo con hambre, es un pueblo sin presente.

Y si esto parece ser lo buscado por quienes nos mangonean en el ámbito de lo estatal, ¿qué decir de quienes lo hacen en el internacional? O si no, ¿qué pensar de esta propuesta de la FAO de recurrir a alimentar a la desesperada población hambrienta a base de insectos, mientras que los ganadores y agricultores, también desesperados, tiran los alimentos en las cunetas y derraman la leche por el asfalto o se utiliza ésta, para paliar el excedente, como ingrediente en ciertos productos cárnicos? La normativa no permite repartir los excedentes entre quienes no tienen acceso a una alimentación básica... y entre tanto, ¿quién hace por presionar para que se cumplan los, en su día, cacareados objetivos del milenio?

Recuerdo la frase atribuida a Mª Antonieta "Si no pueden comer pan, que coman piedras". Esto es lo que se persigue, que mientras arriba se derrocha el foie y el caviar, abajo se coman insectos. Y esto es lo que se conseguirá, porque sólo un pueblo unido puede luchar contra esto, y ¿dónde,  cómo y cuándo, la unidad del pueblo?

miércoles, 8 de mayo de 2013

CARTAGENA, NO HAY QUIEN TE ENTIENDA



Un grupo de personas esperó ayer en Santa Lucía la llegada de la Marcha contra el Paro, que fue recibida con entusiastas gritos y aplausos.
Una mujer, luchadora con muchos años de presencia en los movimientos sociales, me dijo conmovida: "Esto a mí me emociona" .
También a mí me emocionó, pero me disgustó al mismo tiempo. Me disgustó que no fuera mayor, mucho mayor la presencia de los cartageneros y cartageneras que tenían que haber llenado, no ya la plaza, sino todo el barrio, que tenían que haberse extendido hasta el puerto, hasta la estación de autobuses... en una ferviente y calurosa acogida.
Cuando la marcha se encaminó, en manifestación que rodeó el centro urbano, en dirección a la puerta de la Asamblea Regional, un hombre entrado en años, que hacía de gorrilla junto a la Casa del Mar, me preguntó "Esto, ¿pa qué es? ¿pal empleo?" - "Sí, para el empleo" - "Pos a ver si es verdad, que aquí tiene uno que estar de aparcacoches pa sacar algo".
¿Cuántos parados y paradas, cuántas madres y padres de jóvenes sin empleo podían haber acudido a apoyar la marcha y no lo hicieron? ¿Cuántas personas, de una u otra edad, de uno u otro sexo, que protestan por la situación en la barra del bar o la cola del cajero del supermercado, no han salido, ni una sola vez desde que comenzó la crisis, a manifestarse públicamente? ¿Será que no encuentran motivos para manifestarse? ¿Será que no sienten, realmente, los efectos de la crisis?

Porque eso es lo que muchas veces pienso: que en Cartagena no hay crisis, que no ha llegado todavía. Y si ha llegado, es que no se han enterado. No lo sabe la mayoría de la población... ¿Cuál será la Cartagena real? ¿La de las colas del paro, de las personas atendidas por diversas ONGs, de gente que busca y rebusca en los contenedores de basura, de abuelos y abuelas que mantienen a jóvenes sin futuro con una mínima pensión? ¿O la de quienes continúan abarrotando el teatro para ver una comedia, llenando las mesas de los restaurantes y saliendo de vacaciones de lujo? Pienso, a veces, que debe ser la segunda, porque si fuera la primera Cartagena la real, lo que habría estado abarrotado ayer tarde habría sido el paseo Alfonso XIII a la llegada de la Marcha frente a la Asamblea Regional.
No acierto a comprender por qué extraños motivos quienes se sienten agredidos, en la persona de sus allegados o en carne propia, por la surrealista situación que estamos viviendo, dejan de acudir a las calles a protestar por la supresión de sus más elementales derechos.
Definitivamente, este mundo no hay quien lo entienda. 


DECLARACIÓN UNIVERSAL DE DERECHOS HUMANOS.

 Artículo 23:


1. Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo.

2. Toda persona tiene derecho, sin discriminación alguna, a igual salario por trabajo igual.


3. Toda persona que trabaja tiene derecho a una remuneración equitativa y satisfactoria, que le asegure, así como a su familia, una existencia conforme a la dignidad humana y que será completada, en caso necesario, por cualesquiera otros medios de protección social.





4. Toda persona tiene derecho a fundar sindicatos y a sindicarse para la defensa de sus intereses.






lunes, 22 de abril de 2013

GIOCONDA BELLI, CANTORA DEL AMOR






Ay Nicaragua, Nicaraguita 


La flor más linda de mi querer 

Abonada con la bendita, Nicaraguita, 

Sangre de Diriangen. 

Ay Nicaragua sos más dulcita 


Que la mielita de Tamagás 

Pero ahora que ya sos libre, Nicaraguita, 

Yo te quiero mucho más 

Pero ahora que ya sos libre, Nicaraguita, 

Yo te quiero mucho más



Leyendo los poemas de Gioconda Belli, me viene a la memoria la canción de Carlos Mejía Godoy, "Nicaragua, Nicaragüita"

Ay Nicaragua, Nicaragüita
la flor más linda de mi querer...

Ay, Nicaragua, Nicaragüita... el país de la selva tropical y de la gran sabana, el país de las regiones norteñas semidesérticas y de los largos y caudalosos ríos que vierten sus aguas al Caribe… Ay, Nicaragua, Nicaragüita… esta tierra tan lejana y tan desconocida y, a la vez, tan cercana a la nuestra…

Abonada con la bendita, Nicaragüita,
sangre de Diriangen.

Ay, Nicaragua, Nicaragüita… cuna de grandes poetas, que vio nacer las letrillas y canciones de Francisco Quiñones y los poemas modernistas de Rubén Darío… la poesía renovadora de Azarías Pallais y de Salomón de la Selva… los versos vanguardistas de José Coronel y de Luis Alberto Cabrales… La poesía comprometida de Mª Teresa Sánchez y de Ernesto Cardenal…
Ay, Nicaragua, Nicaragüita, ¿cómo un país tan pequeño puede tener tanta importancia literaria, haber dado, en los últimos años, tantos escritores y escritoras…?
Ay, Nicaragua, Nicaragüita… que asististe, en 1948, al nacimiento de Gioconda Belli, que escuchaste, en 1974, recitar sus primeros versos editados…

Gioconda Belli, es una poetisa nicaragüense, cantora del amor, cuya obra no puede ser tratada de manera aislada, separada de su estrecha relación con su tierra, y por ello, esta entrada que escribo sobre la gran escritora, ha venido precedida de esta canción.

Gioconda Belli es Nicaragua, y Nicaragua ha encontrado su mejor cantora en Gioconda Belli.

Ay Nicaragua, sos más dulcita
que la mielita de Tamagás.
Pero ahora que ya sos libre, Nicaragüita,
yo te quiero mucho más.

El estilo de Gioconda Belli escapa a cualquier corriente o escuela.
Erótica, feminista y revolucionaria, su voz sincera es un salto hacia el mundo.
Canta a Nicaragua, como podía haber cantado a cualquier otro país, si hubiera nacido en él, porque ella no escogió nacer en Nicaragua, como tampoco escogió hacerlo en 1948.


Uno no escoge el país donde nace
pero ama el país donde ha nacido.

Uno no escoge el tiempo para venir al mundo
pero debe dejar huella de su tiempo.

Nadie puede evadir su responsabilidad.
Nadie puede taparse los ojos, los oidos, 
enmudecer y cortarse las manos.

Todos tenemos un deber de amor que cumplir,
una historia que nacer,
una meta que alcanzar.

No escogimos el momento para venir al mundo:
Ahora podemos hacer el mundo
En que nacerá y crecerá
la semilla que trajimos con nosotros.

(Uno no escoge: Gioconda Belli)


José Coronel dijo que, con su libro “Sobre la grama”, Gioconda Belli se aseguró un sitio en la literatura de lengua española.
Su obra es una creación poética difícil de encasillar, porque es obra entrañablemente suya, íntimamente personal. Fresca y vitalista, se la puede poner a la par, como seguía diciendo José Coronel, no sólo con las mejores poetisas actuales, sino con todas las grandes poetas que han existido desde Safo… Es de las pocas mujeres que han hecho franca y sincera poesía de amor. Franca poesía de amor es la suya… concebida sin artificios, en ese estado de gracia que sólo genera la libertad de pensar.

Y Dios me hizo mujer,

de pelo largo,
ojos,
nariz y boca de mujer.
Con curvas
y pliegues
y suaves hondonadas
y me cavó por dentro,
me hizo un taller de seres humanos.
Tejió delicadamente mis nervios
y balanceó con cuidado
el número de mis hormonas.
Compuso mi sangre
y me inyectó con ella
para que irrigara

todo mi cuerpo;
nacieron así las ideas,
los sueños,
el instinto.
Todo lo que creó suavemente
a martillazos de soplidos
y taladrazos de amor,
las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días
por las que me levanto orgullosa
todas las mañanas

y bendigo mi sexo.
(Y Dios me hizo mujer: Gioconda Belli)

Y por la libertad de pensar, por la libertad de expresarse, por el derecho a vivir en libertad, vive y escribe Gioconda Belli, autora comprometida, en cuya poesía resalta tres aspectos: El erotismo, el feminismo y el compromiso… Y qué difícil nos resulta distinguir dónde empieza y donde termina cada una de estas facetas en su obra…
Cuando Gioconda Belli escribe su libro “Apogeo” quiere, con él, celebrar el apogeo, el cenit en la vida de las mujeres, ese momento fundamental de la existencia donde la integridad y la belleza física coexisten en la sabiduría y la madurez del intelecto.

Gioconda Belli no dedicó su tiempo en exclusiva a la Literatura, pues es conocida por su papel como luchadora antisomocista. Como muchos intelectuales de su generación, se alistó en las filas del Frente Sandinista de Liberación Nacional.
Fue correo clandestino, transportó armas, viajó por Europa y América Latina obteniendo recursos y divulgando la lucha sandinista, llegando a ser miembro de la Comisión Político-Diplomática del FSLN.



Fue condenada a prisión por oponerse a la dictadura de Anastasio Somoza y hubo de exiliarse posteriormente, primero, a México, y más adelante, a Costa Rica.
Después del triunfo de la revolución nicaragüense ocupó varios cargos dentro del gobierno revolucionario, pero dejó todo cargo oficial en 1986 para dedicarse a escribir su primera novela, "La mujer habitada"

Estamos, dice Gioconda Belli, en una época en que la mujer se enfrenta a las nociones preconcebidas de una sociedad que, hasta ahora, y gracias al esfuerzo de las propias mujeres en todo el mundo, apenas empieza a reconocer el valor y aporte de lo femenino...

La poetisa nicaragüense canta a la condición de la mujer, y su poesía fue considerada revolucionaria en su manera de abordar el cuerpo y sensualidad femenina.


Lo femenino es el tema omnipresente en su poesía.
Y es el tema omnipresente en su prosa, porque la mujer es el tema constante, siempre presente en su obra.


OBRAS PUBLICADAS: 


  • Sobre la grama (1972) - Poesía
  • Línea de fuego (1978) - Poesía
  • Truenos y arco iris (1982) - Poesía
  • Amor insurrecto (1984) - Poesía (Antología)
  • De la costilla de Eva (1986) - Poesía
  • La mujer habitada (1988) - Novela
  • Poesía reunida (1989) - Poesía
  • Sofía de las presagios (1990) - Novela
  • El ojo de la mujer (1991) - Poesía (Antología)
  • Sortilegio contra el frío (1992)
  • El taller de las mariposas (1994) - Cuento infantil
  • Waslala (1996) - Novela
  • Apogeo (1997) - Poesía
  • El país bajo mi piel, memorias de amor y de guerra (2001) - Autobiografía
  • El pergamino de la seducción (2005) - Novela
  • Fuego soy apartado y espada puesta lejos (2006) - Poesía
  • El infinito en la palma de la mano (2008) - Novela